La batalla frente a República comenzó hace 3 años D.C.. ya hace algún tiempo. Desde que Ilicitanos y Republicanos se vieron las caras por primera vez en su historia, ha sido una de las grandes hazañas que se recuerda desde hace tiempo. La rivalidad entre ambos siempre será recordada aquella tarde calurosa del 2006.
República se asentaba en su fortaleza, presumiendo de una larga experiencia en las batallas y que nadie les podia hacer frente en su feudo, ni en el del rival.
Utilizaban las palmeras como trincheras y torres de vigilancia, para alertar y defenderse de un posible ataque enemigo, ya que las fuerzas en muchos momentos flaqueaban y podían refugiarse en ellas.
Estás duras y sabias palabras del comandante republicano, hicieron daño en tierras hamburgueseras.
El general Will se mostraba asombrado ante semejante relato, breve pero muy claro. Sin apenas dar un sólo segundo, reunió al ejército Ilicitano para asaltar la fortaleza Republicana.
Una vez todos reunidos en el reino Ilicitano, actualmente conocido como Ramón Llul o tierra hamburguesera, Will preparó mentalmente a su gente.
El grupo estaba en un estado físico excelente y sabían que ese podía ser un punto a favor en la batalla.
Después de más de 2 horas de reunión, el general Will anunció el ataque a la fortaleza de República a las 16:00h.
Los Republicanos escondian en sus torres bastones, conocidos también como gallatas para poder atacar a los hamburgueseros, y cuando sus fuerzas se lo impidiesen, usarlos como apoyo para mantenerse en pie.
Will recibe una llamada. El comandante Antonio, infiltrado en 1 torre de vigilancia en tierras Republicanas, donde se encuentra un balón pinchado, le avisa de que los enemigos están tomando posición.
El reloj marca las 15:55, y el Ilicitano pisa por primera vez tierras enemigas. Ambos batallones están frente a frente, dispuestos a comenzar.
Pero los Republicanos no contaban con la presencia de Antonio, infiltrado en su fortaleza. El comandante, lanza un objeto pirotécnico a la zona enemiga, que impacta sobre Antonio y Carlos, quebrando parte de su bastón y haciéndolo inservible.
Y ahora.. ¡EMPIEZA LA BATALLA!
Desde entonces, el Ilicitano tiene ganas de venganza. No habrá compasión alguna, y no tendrán piedad.
Continuará..
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